SOY ACTIVISTA por los derechos de los animales, en especial de aquellos con quienes podemos compartir los espacios, los secretos, los silencios.
Lo soy, no como una forma de pasatiempo, entretenimiento o como una actividad pasajera, llevo mi vocación en esta causa como un hábito, si, como parte de mi ser, estar y andar por estos caminos de la vida cotidiana… Curioso, pues también se le dice ¨Tomar los Hábitos¨ cuando una persona se compromete a fondo con una fe….Pues si, para mi, así de profunda y unida a mi persona es esta causa.
Como activista quiero ir de la mano de la inteligencia, aprender, quiero seguir, agotar lenguajes, explorar caminos y ser proactiva, creativa en mis acciones porque se que, si continúo en la búsqueda, hallaremos que otra manera de tratar a los animales ES POSIBLE.
En México los animales han sido explotados, excluidos, torturados, esclavizados y exterminados. Los comerciantes informales de animales continúan sin ser regulados sanitaria, comercial o fiscalmente. Los animales sufren a puertas cerradas en sus manos…y el silencio grita dentro de estos seres vivos, sintientes, que son obligados a ser fábricas de cachorros celo tras celo. Condenados al encierro, al hacinamiento y a una muerte en solitario, cruel y degradante.
Los animales de compañía son excluidos de la justicia, de la compasión de la mayoría, del transporte público, de los contratos de renta, de los parques y, a pesar de que ahora el estado considera ¨un lujo¨ el tenerlos y existe un impuesto del 16% en su alimentación, aún no contamos con espacios y servicios públicos de calidad destinados a ellos.
Perros y gatos siguen siendo torturados en aras de las creencias, de la investigación en empresas farmacéuticas y cosméticas, facultades y en planteles de educación secundaria y media-superior, aún cuando hay decenas de alternativas para reducir este impacto, esta tortura innecesaria.
Animales majestuosos que merecen nuestro respeto como los equinos, los cetáceos, muchos mamíferos marinos y los grandes felinos son esclavizados para diversión y trabajo….¿Para qué? ¿Por qué? Si luego terminan sus días siendo alimento los unos de los otros en una horrenda cadena de depredación, maltrato, encierro e ignorancia.
Nuestros perros y gatos…Y si digo: NUESTROS porque, luego de más de 10 mil años de evolución conjunta y de estrecha relación entre nuestras especies, cada callejero es bisnieto, nieto, padre, hijo de algún otro que, antes, tuvo un plato, un nombre y un techo…. Ellos son NUESTROS y están en riesgo de exterminio por electrocución gracias a que LAS NORMAS OFICIALES MEXICANAS que regulan el tema así lo mandan, aún cuando se ha comprobado internacionalmente el tremendo sufrimiento que se sucede dentro del organismo de un animal por cuyo cuerpo pasa una carga de voltaje letal. ¿Porqué si todas estas acciones nos horrorizan para nuestra especie, las toleramos para ellos?
A ESTAS ALTURAS DE LA EVOLUCIÓN HUMANA tenemos una deuda moral con los animales. La sociedad ha alcanzado un nivel de auto sustentabilidad, de avances y creación de alternativas que EXIGE que nos paremos en seco, volteemos atrás y debamos AGRADECER el servicio que los animales nos han prestado. Debemos ser agradecidos por su sufrimiento, su humildad y su valentía. Por haber aguantado, agradecer por estos milenios de tanta ignorancia de nuestra parte, tanta dependencia de nosotros de ellos…. Revisa la historia, la evolución del homo-sapiens y te darás cuenta que no habríamos alcanzado este punto, sin los animales.
No es secreto que han sido motor de nuestra propia evolución, de muchas formas. Aprendimos a cazar siguiéndolos, ellos nos mostraron donde estaban los recursos, los refugios, a organizarnos como ellos, a convertirnos en verdaderos mamíferos gremiales y a encontrar en la unión, la fuerza. Para algunos pueblos fueron hasta representación de sus dioses…. ¿Así les pagamos? La indiferencia es la peor manera de dar las gracias……Por eso, soy activista y tomo acciones.
Llegó el momento de dejar de lado nuestra necesidad de dominio sobre los animales. Nos hemos olvidado que nosotros también lo somos.
Soy activista por los derechos de los animales porque también estoy harta de todas las formas de conducta medieval salvaje, violenta, cruel y destructiva en su contra. Considero que quien las ejerce, frena el avance de nuestra especie en el camino de lograr el equilibrio que el planeta necesita. Apenas estamos a tiempo, PARA QUE LOS HUMANOS SOBREVIVAMOS en compañía de ellos, nuestros maestros…porque en el futuro seguiremos aprendiendo.
Soy activista porque creo que otro mundo para los animales ES POSIBLE. Me manifiesto en la calle si soy requerida. Escribo al respecto porque es mi medio y acudo a reuniones cuando soy y hasta cuando no soy requerida pues necesito, necesitamos gente, que avancemos, pues una sociedad, que tiene legalizada la violencia y la crueldad hacia otros, no puede garantizar la seguridad ciudadana.
Soy activista porque NO SÓLO ME IMPORTAN LOS ANIMALES, lo soy porque como consecuencia del SILENCIO, las sociedades se encuentran inmersas en un ambiente de violencia y agresión, que se revierte hacia todo el orbe y cuyas raíces, obedecen a la imposición de antivalores contrarios al respeto de la vida, la justicia, la libertad y los derechos de otros.
JUNIO 21. 2014